Vistas de página la semana pasada

sábado, 28 de enero de 2012

El Valor de La Puntualidad


La puntualidad es la virtud que representa el respeto hacia uno mismo y hacia los demás. Ser puntual supone un signo de consideración hacia las personas que están esperando. También es la forma de satisfacer una obligación en un plazo determinado. Es el esfuerzo, voluntad y sacrificio para hacer las cosas a tiempo o estar a tiempo en el lugar adecuado, y así cumplir los horarios aceptados.
 

Retrasarse es equivalente, a demostrar desprecio por el tiempo de otra persona y se puede considerar un insulto. La impuntualidad puede excluir, a los que llegan más tarde a las reuniones acordadas. Es una virtud que debe enseñarse, desde los primeros años de la vida y dentro de la familia, donde las normas y costumbres, establecen horarios para cada actividad familiar. 
 

Practicar la virtud de la puntualidad, es una forma de hacer a los demás la vida más agradable, mejorar nuestro orden e intentar convertirnos en personas dignas de confianza. Para ser puntual, primeramente debemos ser conscientes que toda persona, reunión, actividad o cita, es importante para los que lo organizan y para los que asisten. Una norma muy común entre la gente puntual dice que “si crees que no podrás llegar a la hora acordada, intenta llegar antes”.
 

Normalmente los más puntuales, son los que están mas ocupados, pues están obligados a organizar mejor sus obligaciones y no se pueden dar el lujo de llegar tarde, ni que nadie llegue tarde a visitarlos. Las familias tienen el deber de inculcar en los hijos la puntualidad, lo primero que deben hacer los padres es practicar continuamente la puntualidad, dando ejemplo en todas sus actividades. Si los hijos no ven la puntualidad de los superiores, nunca llegarán a ser puntuales.
 

Para que la puntualidad sea una constante en las relaciones familiares, escolares y sociales y así poder cumplir con todos los compromisos, debe haber un programa por escrito de las actividades familiares, complementado con un horario, lo más inflexible posible, para el día y la semana. Si la hora de llegar a la casa o de levantarse está previamente acordada, debe cumplirse estrictamente, pues los demás sufren las consecuencias esta ocurre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario