Vistas de página la semana pasada

lunes, 22 de octubre de 2012

NO, CON REPRESIÓN NO


Ocoa está viviendo las horas más amargas de las últimas décadas. El terror, la represión y el abuso se han combinado para hacer sufrir a la población.
Nadie se opone a que se implemente seriamente una gran cruzada contra el ruido y la delincuencia, así como el rescate de las áreas del parque y todo su entorno. Pero, ¿quiénes son y dónde están los delincuentes?
El parque debe cumplir con su cometido de ser un espacio de esparcimiento y recreación sana. Un lugar al que se pueda llevar la familia a compartir, descansar y divertirse con la mayor seguridad posible.
Pero de ese sentir colectivo y mayoritario de la gente de Ocoa, a la ola represiva que han desatado las principales instituciones que deben velar por la seguridad y el orden, la distancia es muy larga.
Se equivocaron los 7 que emiten las resoluciones o los 8. Vejar y abusar de menores de edad o de personas sanas e inocentes que transitan libremente por la calle es algo ignominioso. Ningún decreto, resolución, disposición o ley que haga daño a la gente, puede ser conveniente para la gente.
Ojalá fuera un plan serio y duradero, que devuelva la tranquilidad y la seguridad a la gente de nuestros barrios y ciudades. Pero sabemos que eso es mucho bulto. Mucho discurso que en poco tiempo se lo lleva el viento.
Sabemos que ese plan se está implementando ahora, porque en los años inmediatos no habrá elecciones. En unos cuantos años, la mayoría de esas instituciones apoyarán, encubrirán o serán parte de la violación de todas las normas habidas y por haber.
Además, los cuerpos policiales nacionales no tienen moral para combatir la delincuencia. Con contadas excepciones, ellos saben muy bien quiénes son los delincuentes y dónde están operando. Saben cuándo están en el parque, en el barrio, en el campo o la ciudad. Y muchas veces lejos de enfrentarlos, les avisan cuando se acerca el operativo. No nos hagamos los tontos.
El derecho al libre tránsito no solo es legal, sino que ustedes mismos son los llamados a garantizarlo. Además tenemos casos de menores y adolescentes que fueron vejados y maltratados mucho antes de las 8 de la noche. Eso en vez de seguridad y paz, es terror y represión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario